A pesar del nombre, ésta es una receta muy sencillita, surgida por improvisación a partir de una clásica receta que circula por muchos sitios en Internet: el pastel de cabracho. Como no tenía cabracho, improvisé con otros ingredientes "parecidos" que pudieran sustituirlo, así que recurrí a los socorridos (y también económicos) palitos de mar y a las gambas peladas del congelador. Y rebuscando entre las latas también me pareció bien una de mejillones al natural. Los productos, por tanto, son muy asequibles y la receta, muy fácil de hacer y muy vistosa. El nombre es lo más rebuscado de la receta, aunque, todo sea dicho, es debido también a la casualidad: pirottini es la palabra en italiano que venía escrita en el envoltorio del molde que he estrenado...Y como me ha parecido sonora y apropiada, me la he quedado para el invento culinario de hoy.
INGREDIENTES:
- 1 lata de mejillones al natural.
- 1 paquete de palitos de surimi o delicias de mar.
- 1 puñado de gambas peladas congeladas.
- 1 brick de nata (200 ml.).
- 5 huevos.
- 5 cucharadas de tomate frito casero.
- 3 pimientos del piquillo.
- margarina para untar el molde y pan rallado.
PREPARACIÓN:
Se desmenuzan los palitos y se trocean lo más posible los mejillones. Batimos en la batidora los huevos, la nata, las cucharadas de tomate y los pimientos del piquillo. Volcamos en un bol y añadimos al batido el marisco troceado. Removemos bien con una cuchara y le ponemos un poco de sal y pimienta.
Encendemos el horno y ponemos a 180º para que se vaya calentando. En el molde untamos margarina y espolvoreamos con pan rallado. Yo he elegido un molde de cupcakes de silicona y uno de cristal cuadrado, para poder meterlos a la vez en el horno, pues de hacer toda la crema en los cupcakes, tendría que haber esperado y hacerla en dos veces. Ponemos las gambas peladas, que previamente habremos descongelado, en el fondo de los moldes. Encima echamos la crema batida y metemos en el horno a 170-160º durante unos 40 minutos aproximadamente.
Para comprobar si está hecho pincharemos con un cuchillo; si sale limpio estará listo. Se puede servir frío o caliente, acompañado de lechuga muy picada, salsa rosa o mayonesa.
Esta receta puede hacerse con cualquier pescado hervido: cabracho, merluza, rape...Y, por supuesto, se puede hornear en cualquier molde en lugar de utilizar moldes individuales, con lo cual, en lugar de pirottini o cupcakes, tendremos una mousse o un pastel igual de rico.
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